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Vacaciones 2022: consejos para cuidar el auto antes, durante y después de ir a la playa

Llega el calor y con él empezamos a imaginarnos en la playa, con deseos de diversión, descanso, disfrute y vacaciones. Pocas personas, sin embargo, piensan en las consecuencias o el cuidado especial que hay que darle al vehículo con el que se viaja. Es que los seres humanos disfrutamos de la arena, el viento o del mar; pero no así nuestro vehículo. Estos sufren daños importantes si no se les da el cuidado adecuado.

Las zonas costeras se caracterizan por tener mucha humedad ambiental al estar cerca de grandes concentraciones de agua. El mar produce cantidades de sal y salitre que se transportan por el ambiente a través del aire y dañan los vehículos.

El salitre, en particular, es un mineral presente en la zonas costeras y de una tonalidad blanca. Este se halla en la sal y favorece a la corrosión de algunos materiales del auto como los metales, las gomas o incluso la tapicería.

Sumado a esto, se incluye el polvo generado por la misma arena o los bosques. Sin embargo, con los recaudos necesarios, la carrocería de los autos sufrirá menos consecuencias y, por ende, se mantendrá en condiciones por más tiempo.

Desde En Movimiento, el sitio de noticias de AXION enery, queremos compartirte algunas recomendaciones para antes de salir a la costa, durante tu estadía y después de haber disfrutado de la playa:

Antes de partir

Previo al viaje siempre es recomendable realizar un chequeo general del auto. El primer punto es revisar los niveles y fugas de fluidos del motor como pueden ser el aceite, el líquido de frenos o el agua refrigerante. Ya sea por los largos trayectos o las altas temperaturas, estos pueden ser exigidos más de lo acostumbrado.

En segundo lugar, se encuentra la inspección del estado de los neumáticos. Estos estarán transitando por un sendero no tan asiduo como es la arena. En este punto, no se trata solo de observar la presión de las ruedas, sino también el peso que el auto tendrá durante el trayecto. Contabilizar las personas o el peso de las valijas, es fundamental a la hora de decidir cuál será la presión final.

Una manera de corroborar el estado de los neumáticos es a través de la “prueba de la moneda”. En ella, se coloca de forma vertical una moneda en alguna de las canaletas o ranuras de la rueda.

Si queda cubierta por la goma, significa que se pueden seguir utilizando. Caso contrario, es decir, si se logra ver el borde de la moneda, será necesario un reemplazo con urgencia.

Para el caso particular de la arena, es recomendable quitar presión a las gomas si se quiere transitar por los caminos arenosos o, más aún, si la persona desea entrar a la playa con su vehículo. Disminuir la presión permite ensanchar la banda de rodadura, es decir, la pisada y transitar mejor.

Luego hay un consejo sencillo que podés tomar como precaución antes de salir. Es la de llevar sábanas o cobijas viejas para cubrir los asientos, el piso o incluso el auto, si es que no se refugiará bajo techo durante la noche. Esto permitirá mantener en buen estado el interior y el exterior del vehículo, sin muchos sobresaltos.

Durante tu estadía

Mientras disfrutás de playa con tu familia, amigos o en soledad, es bueno tomar decisiones que ayuden a mantener el auto en condiciones y, por qué no, dedicarle un tiempo del día para cuidarlo.

La primera recomendación es intentar estacionar en zonas donde no esté expuesto directamente al sol en horarios de mucha intensidad. De esta manera, se evita que se dañen elementos de electrónica o la pintura.

La siguiente propuesta puede resultar un poco aburrida, pero puede ser vital para el cuidado del auto: lavarlo regularmente durante tu estancia. Con un lavado, al menos rápido, se evita la corrosión de las partes internas y externas del auto, ya que pueden dañarse con la sal y otras partículas de la atmósfera características de la costa.

Es verdad que es imposible sacarnos toda la arena que tenemos en el cuerpo antes de ingresar al auto. Pero adquirir el pequeño hábito de realizar una buena limpieza antes de subirse, puede ser un gran diferencial. Otra opción es guardar una pequeña aspiradora en el baúl para no acumular la arena con los días o, como mencionamos, una manta o alfombra extra.

Luego de una zambullida al mar o en la pileta, es común que las personas ingresen al vehículo todavía un poco mojadas. Por eso, en caso de no poder cambiarse la ropa, sería conveniente sentarse en una toalla seca o adquirir fundas especiales para no estropear la tapicería o generar malos olores al coche.

Por último, para sobrepasar las altas temperaturas a las que son expuestos los vehículos y evitar quemarse con el volante o la palanca de cambios, es recomendable utilizar parasoles. Su uso evita el desgaste interno del auto.

Volver a casa

Puede parecer obvio, pero es importante que, a tu vuelta y ni bien sea posible, limpies el auto. Podés hacerlo vos mismo, pero también se puede invertir en un profesional para que lo haga con más detalles.

La primera recomendación es comenzar con el exterior para evitar que el salitre, el polvo o la suciedad dañen el vehículo. Una manera de eliminarlo es con agua a presión. Previo a eso, comprobá que se eliminó toda la arena para no estropear la pintura.

Luego es el momento de ocuparse del interior del auto. En esta oportunidad, primero hay que vaciarlo de todos los resabios de las vacaciones y aplicar una buena limpieza con aire a presión y una aspiradora potente que consiga quitar toda la arena pegada.

Para el caso del motor, es aconsejable hacerlo con un profesional que aplique una limpieza a fondo por debajo y arriba del aparato motriz. Esto permitirá chequear con precisión y mejores detalles si hubo algún averío luego del viaje.

Con toda esta información, no hay más que simplemente disfrutar y saber que, además de las personas, los vehículos pueden también disfrutar de la playa.

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